La pandemia, la inflación, los altos precios del petróleo en el mercado internacional, la guerra Rusia-Ucrania, son factores externos que han impactado de manera negativa en los precios locales.
EL SALVADOR .- A eso se debe agregar la escasez de mano de obra, y el incremento en el alquiler de la tierra, que no abonan a la producción y por ende a la seguridad alimentaria, dijeron Danilo Pérez, del Centro Para la Defensa del Consumidor y Luis Treminio, de CAMPO.
Danilo Pérez, dijo que desde enero de 2021, cuando se registró el ultimo precio más estable, la canasta básica aumentó su costo. Los insumos de la dieta alimenticia en el área urbana en 2022 costaban $199.24 y a marzo de 2023 subió a $249.08. Es decir, un aumento de $49.84, lo que equivale a 20 % .
Mientras que la canasta básica rural cuesta $188, es decir, aumentó $47.05, un equivalente del 25 % con relación a 2022.
Y vienen a encarecer más los productos, el alquiler de la tierra, que ha subido de $100 una manzana, a 200 dólares, dijo por su parte Luis Treminio, de CAMPO.
Si bien es cierto que el país logra garantizar la disponibilidad de alimentos, pero a base de importación, algo que no le conviene a los productores locales ni a los consumidores, dijo Pérez.
En la importación de maíz, frijol y arroz en cuatro años ha sido de 32.8 % en frijol; 27.7 % de maíz y arroz, el 62 %.
En 2022 la producción nacional de alimentos habría caído un 29 % menos que 2021, un déficit de cinco millones 92 mil quintales, según estimaciones para los meses de agosto, septiembre y octubre de 2022. Para este año se necesita un consumo de 25 millones en los cuatro granos básicos y sólo se logrará producir 19 millones, es decir, un déficit de 5 millones 188 mil quintales.
Desde que se firmó el CAFTA-DR, se estableció que el maíz nacional estaría protegido con un 20 % del arancel, pero al liberarlo lo dejan a merced del mercado, afirmaron.
De ahí que recomendaron la aplicación de una política nacional agropecuaria y el establecimiento de una reserva estratégica de granos básicos.
Pérez afirmó que un millón 700 mil salvadoreños se encuentran en pobreza y con el alto costo de los insumos enfrentan dificultades para alimentarse, por lo que propone dotar de alimento focalizado a las familias más vulnerables.
Con relación al salario mínimo, Danilo Pérez, del CDC, recomendó excluir a la micro, pequeña y mediana empresa porque de lo contrario podría haber desempleo.
