ARENA y el FMLN postulaban a los mismos de siempre, porque se consideraban «puros, firmes y leales», eran los de «hueso colorado», los únicos «honestos y honrados».
EL SALVADOR. – El ministro de Trabajo y Previsión Social, Rolando Castro, aseveró que ARENA y el FMLN están «casi a punto de su extinción»; contrario a eso, «Nuevas Ideas es el partido del presente y del futuro».
ARENA y el FMLN cuando realizaban sus elecciones internas para elegir cargos de elección popular, armaban una «estrategia», afirmó el ministro Castro, ¿cuál era?, que debían continuar postulándose los mismos de siempre, porque según Castro, se consideraban «puros, firmes y leales», eran los de «hueso colorado», los únicos «honestos y honrados».
En esa táctica, si alguien de las estructuras nacionales, departamentales o municipales, aspiraba a un cargo de elección popular, «de manera rápida», ARENA y el FMLN los calificaban con epítetos peyorativos, según el titular de Trabajo, como, «vendidos, infiltrados, incapaces, incompetentes y traidores».
En ese contexto, afirmó Castro, que el partido de izquierda con el de derecha, «garantizaban» que los cargos de elección popular estuvieran centrados en una «rueda de caballitos», donde los mismos se reelegían siempre y nadie quería atreverse a competir, porque sería castigado con un «linchamiento político», lamentó el ministro Castro.
No obstante, en la actualidad, Nuevas Ideas es el partido del presente y del futuro, así lo afirmó Castro, ministro que remarcó que los de NI, «deben hacer, exactamente, todo lo contrario de lo que estos partidos políticos moribundos hicieron».
Este 24 de junio Nuevas Ideas ha habilitado las 14 sedes departamentales para que los afiliados puedan empadronarse. El próximo 9 de julio decidirán los perfiles que compitan en las elecciones de 2024.
«No vayan a limitar a sus estructuras, a la gente nueva que aspira a someterse a las internas de manera democrática, construyendo epítetos peyorativos e inventados para deslegitimarlos, más bien permitan que las bases, las estructuras democráticamente y sin influencias lo definan», remarcó Castro.
«Si no lo hacen así, estarán condenados a repetir la historia», concluyó el ministro de Trabajo.
