A la hora de ir de compras, a veces se gasta más de lo previsto y no se compra lo que se necesita.
Es bastante habitual que llegas al supermercado para comprar lo indispensable y terminas en la caja con el carrito de la compra hasta los topes y una cuenta kilométrica.
Lo peor es cuando llegas a casa y te das cuenta de que al final no has comprado lo que necesitabas y en cambio llevas alimentos que no serás capaz de comerte antes de que caduquen.
Para que el súper no te atrape con sus encantos, te dejamos algunos consejos para que tu compra sea más eficiente.
- Elegir un menú semanal
Si haces un cuadrante con lo que vas a almorzar y cenar durante la semana, tendrás más claro los ingredientes que vas a necesitar y la cantidad. Así no comprarás alimentos de más que se te puedan caducar o que tengas que congelar. - Revisa la despensa
Antes de hacer la compra, tendrás que revisar lo que tienes en el frigorífico y la despensa para no duplicar productos. Además, es recomendable que anotes aquellos que faltan o los que están a punto de acabarse para reponerlos. - Repasa la lista otra vez
Cuando tengas acabada la lista, vuelve a repasarla y piensa si realmente necesitas tantas galletas o productos frescos que no vas a poder consumir antes de que se estropeen. Elimina los que son superfluos y los más caros y no tan necesarios como pensabas en un primer momento. - Ayúdate de la tecnología
Si no te aclaras con la lista de la compra, siempre puedes acudir a las nuevas tecnologías. La app de Alcampo, por ejemplo, te permite hacer la lista optimizando tu ruta en el híper y ordenando la lista de los productos por pasillos. Además, podrás conocer la información nutricional de un producto a través de la funcionalidad ‘Información de producto’, acceder a las ofertas y promociones de una forma rápida y sencilla e incluso pedir turno en la pescadería y la charcutería desde la propia app. Si vas a celebrar una fiesta, la aplicación te permite convertir tu lista de la compra en colaborativa e invitar a tus familiares y amigos a añadir productos para el evento. - Compra sin hambre
No hay nada peor que acudir al supermercado con hambre. Las ganas de ingerir alimentos te harán comprar productos que no necesitas y que suelen ser bastante calóricos, desviando tu intención de otros más saludables. Además, es mejor que hagas la compra con tiempo y no con la prisa de no haber comido, ya que podrás comparar y elegir la mejor opción. - Orden en el carrito
A la hora de llenar el carrito, comienza por los productos no perecederos, continúa con los frescos y termina con los congelados para que aguanten más y no goteen. Intenta además separar los productos de droguería de los alimentos. - Observa el etiquetado
La etiqueta de los envases de alimentos es una garantía de seguridad. Debes revisar principalmente la lista de ingredientes, el contenido neto para que no te lleve a errores, la fecha de consumo preferente o de caducidad, si tiene unas condiciones especiales de uso o conservación, el país de origen y el modo de empleo, entre otras indicaciones. - Mira las ofertas
A veces encontramos productos de oferta que no teníamos pensado comprar pero que están a buen precio y nos pueden venir bien. Procura que estos no sean perecederos para que puedas mantenerlos en la despensa. Un buen truco cuando encuentres alguna oferta es calcular por el precio de cada unidad o por el precio del kilo. - Elige productos frescos
Los productos frescos son más baratos que los envasados o congelados y contienen menos sal, conservantes y antioxidantes. Además, es mejor comprar productos de temporada ya que son más económicos. - Presta atención en la caja
Es importante que observes cómo la persona que está en la caja pasa los productos por el escáner para que no se produzcan errores. No olvides repasar el ticket antes de salir del supermercado y comprobar que todo está correcto tanto en cantidades como en precios.