Es una práctica muy beneficiosa en muchas circunstancias.
Iniciar el día con un vaso de agua tibia es una práctica antigua que se ha ganado un lugar en muchas culturas debido a sus múltiples beneficios para la salud. Según diversos especialistas en salud y bienestar, beber agua tibia en ayunas no sólo ayuda a hidratar el cuerpo después de varias horas de descanso, sino que también tiene efectos positivos en la digestión, la desintoxicación y el metabolismo.
Estimula la digestión y alivia el estreñimiento
Uno de los beneficios más mencionados de beber agua tibia al despertar es su capacidad para estimular la digestión. El agua tibia ayuda a «despertar» el sistema digestivo, promoviendo el flujo sanguíneo hacia el tracto gastrointestinal y facilitando el movimiento de los alimentos a través del intestino.
Esto es especialmente beneficioso para las personas que sufren de estreñimiento, ya que el agua tibia puede actuar como un lubricante natural para el intestino, haciendo que las evacuaciones sean más regulares y menos dolorosas.
Ayuda en la desintoxicación del cuerpo
Durante la noche, el cuerpo trabaja en sus procesos de limpieza y reparación, acumulando toxinas que deben ser eliminadas al despertar. Beber agua tibia en ayunas ayuda a activar el sistema digestivo y el hígado, órganos clave en el proceso de desintoxicación. Además, el agua tibia promueve la sudoración, ayudando a eliminar las toxinas a través de la piel.
Según especialistas en naturopatía, el agua tibia puede facilitar la eliminación de desechos acumulados, brindando una sensación de limpieza interna desde el inicio del día.
