El gigantesco sistema de cohetes de espacio profundo de SpaceX, Starship, despegó de manera segura este sábado por la mañana, pero terminó prematuramente con una explosión y una pérdida de señal.
A los 12 minutos del lanzamiento, los controladores de SpaceX perdieron comunicación con Starship y se cortó la transmisión en directo por los distintos canales.
Fue el segundo vuelo no tripulado de prueba de la empresa privada aeroespacial SpaceX. Con este aparato, en asociación con la NASA, se busca que el ser humano vuelva a la Luna en 2025
El Starship y su booster Super Heavy han volado juntos sólo una vez hasta la fecha, en un lanzamiento de prueba que despegó de Starbase el 20 de abril último, pero explotó a los 4 minutos de lanzamiento, justo cuando ambos impulsores debían separarse.
La misión de hoy tenía como objetivo enviar la etapa superior Starship alrededor de la Tierra, terminando con un amerizaje en el Océano Pacífico cerca de Hawaii a los 90 minutos de iniciado el despegue, trayecto final que no pudo completarse.
SpaceX considera que fue un éxito la prueba del segundo vuelo de Starship pese a que el propulsor Super Heavy explotó tras la separación y que la nave Starship llegó al espacio y se autodetonó debido a problemas en sus motores o a una posible desviación de trayectoria.