El proyecto supone el esperadísimo regreso de la cantante a la música y se posiciona como el álbum más personal de toda su discografía.
ESTADOS UNIDOS.- Habían pasado cinco años desde que Selena Gomez lanzara Rare, su tercer álbum como solista y al que le sucedió Revelación (un EP de siete canciones en español entre las que destaca Baila conmigo junto a Rauw Alejandro), pero las esperanzas de que volviera a la música con un proyecto completo, alejado de sencillos y colaboraciones espontáneas, eran más bien escasas. Cada vez que a la artista se le preguntaba acerca de esta posibilidad, había respuestas distintas, aunque siempre se podía deducir su inclinación hacia el cine y la televisión por encima de todo. Y así sucedió. Gomez se centró en estrenar con éxito varias temporadas de Solo asesinatos en el edificio, la premiada y comentadísima Emilia Pérez y multitud de lanzamientos de su marca de cosmética superventas, Rare Beauty. Sin embargo, era natural que el amor entre la cantante y Benny Blanco, uno de los músicos más exitosos en la industria del pop, acabara materializándose en algún tipo de proyecto. Y es por esa razón que, a partir de hoy, sus fanáticos podrán disfrutar de I Said I Love You First, el álbum más sincero e íntimo de Gomez hasta la fecha.
A pesar de las diversas especulaciones acerca de cómo y cuándo se conocieron, lo cierto es que la música siempre ha estado de su lado y que su relación viene de muy atrás. Ya en 2015, Blanco participó en el desarrollo de Same Old Love y Kill ‘Em With Kindness, dos de los sencillos de Revival, y a estas les sucedieron otros temas como I Can’t Get Enough, lanzada en 2019 y la cual incluyen ahora en este álbum con el propósito de recopilar todos sus trabajos juntos. Quizá el amor siempre estuvo con ellos en el estudio de grabación, pero no fue hasta hace dos años cuando por fin se dieron cuenta de lo que sucedía realmente entre ambos. No obstante, ahora esta historia cobra vida en forma de álbum y ha motivado un compromiso matrimonial (y profesional) que promete seguir dando muchas alegrías. “Sentí que [este disco] era una pequeña muestra de lo que somos y de cómo logramos esto juntos, de cuánto nos encantó hacerlo y de cuánto nos queremos. Simplemente sentí que estaba destinado a existir”, le contó Blanco al periodista Zane Lowe en una entrevista para Apple Music. Una manera sencilla de explicar el origen del proyecto, pero que resume a la perfección su propósito: el de ser una carta de amor abierta al mundo.
Entre lágrimas y recitando unas palabras de agradecimiento, Selena Gomez abre el disco de una forma extremadamente melancólica (que recuerda, por cierto, al inicio de The Heart Wants What It Wants, una de las canciones preferidas desde siempre por sus fanáticos) y procede con Younger And Hotter Than Me, una honda reflexión sobre la presión femenina de siempre tener que mejorar y de, en consecuencia, perderse inconscientemente a una misma. Pero, en realidad, el álbum se mueve en una montaña rusa de emociones con pistas nostálgicas como Don’t Wanna Cry o You Said You Were Sorry, otras como How Does It Feel To Be Forgotten o Don’t Take It Personally en las que se percibe el enfado y la frustración de la cantante por una relación pasada, e incluso algunas con una esencia mucho más alegre como las sensualísimas Cowboy y Sunset Blvd. De hecho, esta última homenajea en su título al lugar donde Blanco y Selena tuvieron su primera cita, el emblemático Sunset Boulevard de Los Ángeles, y, por ese mismo motivo, fue elegida para ser el tercer sencillo de presentación del proyecto.
A las órdenes de Petra Collins, Benny y Selena se pusieron delante de la cámara para crear el video musical para Sunset Blvd, en el que, con bastante picardía y sentido del humor, trataron de plasmar su química a la par que homenajearon a la cinta Corazonada (1982), del mismísimo Francis Ford Coppola. Una pista divertida y bailable que contrasta mucho incluso a nivel de letra con el primer sencillo, Scared Of Loving You, un tema casi en acústico que trata de ese miedo a amar con locura y que vio la luz el pasado día de San Valentín. “‘Cause I’m not scared of lovin’ you, I’m just scared of losin’ you. I’m not scared of anyone or dying young, or if you’re gonna find somebody new, ‘Cause how could they love you as much as I do? [Porque no tengo miedo a amarte, solo tengo miedo a perderte. No le tengo miedo a nadie, ni a morir joven, o a si encontraras a alguien nuevo, porque ¿cómo podrían amarte tanto como yo?”, canta con suavidad la texana en esta última canción.
Aunque si hay algo que I Said I Love You First esconde, además de la experimentación pop propia de Blanco, es unas cuantas colaboraciones. La primera fue la animada Call Me When You Break Up junto a Gracie Abrams, pero a medida que la escucha del álbum se prolonga, se oye, por ejemplo, la voz melosa de María Zardoya, miembro del grupo The Marías, en Ojos Tristes (una pista que, como se puede intuir en su título, referencia a Muchacho de los ojos tristes de Jeanette). También, aparece de repente la joven rapera GloRilla en Cowboy y, desde el primer beat, se nota la presencia de Charli xcx en la octava pista, titulada Bluest Flame. Un compendio de featurings muy dispares entre sí que, en definitiva, elevan el álbum en su conjunto.
No hay nada confirmado de momento acerca de una posible gira y ni siquiera ninguno de los dos se ha pronunciado al respecto, pero lo que sí que han hecho es crear un disco en el que se enorgullecen ante el mundo de su historia de amor y con el que Blanco ha logrado traer de vuelta a Gomez a la música. Y parece ser que la cantante está muy contenta con esta decisión, ya que, además de I Said I Love You First, la pareja ya ha estado dando pistas sobre un posible lanzamiento de Seven Heavens, un proyecto experimental de Gomez (en el que estarían incluidas algunos de sus temas más celebrados por la crítica como Fetish y Bad Liar) que se quedó en el tintero hace casi una década y que argumenta una vez más que esta alianza romántica y musical no ha hecho nada más que comenzar. Información Vogue.
