En Israel, los muertos ascienden a 1.400, de los que 308 son soldados que fallecieron en el ataque masivo de Hamás.
Asimismo la milicia palestina secuestró a 222 personas, que fueron llevados a la Franja de Gaza.
En un discurso televisado, el portavoz oficial del Ejército israelí, Daniel Hagari, ha precisado que entre los rehenes hay “varios ciudadanos extranjeros”, entre ellos 13 latinoamericanos y dos españoles.
La cifra de rehenes antes mencionada ya no incluye a Judith Ranan y su hija adolescente Natalie, dos estadounidenses que Hamás liberó el viernes por la noche por “razones humanitarias”.
“Seguimos actuando por todos los medios disponibles para que los secuestrados regresen sanos y salvos a casa”, agregó Hagari durante su declaración de lunes.