Delincuente condenado, empresario, mercenario, y hasta ahora, al servicio del presidente de Rusia, Vladímir Putin. Así es Yevgueni Prigozhin, el líder del Grupo Wagner, una empresa militar privada que respondía a los intereses de Rusia. No obstante, las cosas han cambiado.
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Para entender quién es Yevgueni Prigozhin hay que remontarse a un par de décadas atrás. Para Anastasia Kirilenko, periodista rusa de investigación en The Insider, lo primero que lo definiría, antes que mercenario, es que es un delincuente condenado por el robo de pisos en San Petersburgo. Debido a estos robos, cumplió una condena de diez años de prisión.
A su salida de presión, Prigozhin comenzó a trabajar en el sector alimentario, produciendo comida que más tarde serviría al ejército ruso. Esto le granjeó el mote del “cocinero de Putin”, ya que estuvo recibiendo contratos por parte del Estado que no solo le insuflaron fama, sino también grandes sumas de dinero.
Gracias a ese dinero, Prigozhin pudo crear fábricas de trolls un poco antes de 2012. Es decir, lugares donde se generaban bots para diferentes redes sociales en internet que contaminaban el discurso político y público. “Estos trolls se hicieron para generar mensajes a favor de Rusia y en contra de Occidente”, afirma la periodista. Este tipo de actividades lo vincularon con la campaña de Rusia en redes sociales a favor del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en las elecciones de 2016 y en contra de Hillary Clinton.
Actualmente se ha convertido en el enemigo del presidente ruso Vladimir Putin, quien amenaza con darle golpe de estado.