«Las condiciones atmosféricas que generaban lluvias han cesado», detallaron.
EL SALVADOR.- La Dirección General de Protección Civil, dejó sin efecto la alerta estratificada a nivel nacional, alerta naranja en franja costera, cadena montañosa y área metropolitana de San Salvador y alerta amarilla en el resto del país por remanentes de la Depresión Tropical Sara, emitida el pasado 18 de noviembre de 2024.
Dado a lo anterior, emitieron ALERTA VERDE POR INGRESO DE VIENTOS NORTES. Las intensidades del viento oscilarán de 10 a 25 kilómetros por hora con ráfagas ocasionales variando entre 30 a 60 kilómetros por hora, siendo más notables entre el jueves 21 y viernes 22 de noviembre en zonas altas.
Las temperaturas mínimas matutinas se notarán disminuidas el sábado 23, domingo 24 y lunes 25 de noviembre en varios sectores del país con énfasis en zonas altas.
El rango de temperaturas mínimas en zonas altas, estará entre 4 y 14 grados centígrados en valles interiores entre 16 y 19 grados centígrados, y en zonas costeras entre 21 y 23 grados centígrados.
Cabe mencionar que la presencia del viento puede generar una reducción puntual en la sensación térmica a cualquier hora del día. Es posible suceda alguna lluvia o chubasco aislado para este jueves 21 de noviembre, y el resto de días no lloverá.”
A la población en general se recomienda:
Evitar la quema de maleza seca con especial cuidado en grandes extensiones de tierra, como en el caso de los agricultores, quienes deben de buscar alternativas al uso del fuego para la preparación de tierras y eliminación de rastrojos.
Evitar hacer fogatas, cocinar con leña al aire libre o quemar basura, en especial cuando existan condiciones de ráfagas de viento. Al sospechar o detectar un conato de incendio, informar lo más pronto posible a las instituciones de respuesta correspondientes.
Verificar e intervenir las zonas de potencial peligro en las viviendas y sus alrededores, por ejemplo, ventanas, tejado o láminas inestables o no aseguradas y ramas, árboles y vallas publicitarias propensas a desprenderse o caer.
Abrigarse adecuadamente ante los vientos y bajas temperaturas, en especial las personas con enfermedades respiratorias, niños y adultos mayores.
A la navegación marítima y aérea, pesca artesanal y deportiva se les recomienda evaluar las condiciones atmosféricas y oceanográficas antes de realizar sus actividades, y se recomienda tener precaución por posibles fuertes vientos en aguas profundas.