El ganador sorprendió al campeón defensor desde el comienzo y nunca lo hizo sentir cómodo para llevarse su segundo título en la historia de la competición. Messi estuvo presente en Nueva Orleans.
ESTADOS UNIDOS.- Prácticamente fue un juego perfecto para los Eagles de Filadelfia y eso se se notó en el marcador, que casi por tres cuartas partes del juego mantuvo en ceros a los otroras imbatibles Chiefs de Kansas City quienes vieron en el Super Bowl LIX de Nueva Orleans derrumbarse su reinado al caer por 40 -22.
Quizás el abucheo que sufrió Taylor Swift al aparecer en la mega pantalla del Superdome era un augurio para el equipo liderado por Patrick Mahomes y Travis Kelce. Si en todo el año todo les salió bien, en el Super Bowl todo les salió mal con cúmulo de pases incompletos e interceptados.
Una vez que los silbidos de los hinchas se hicieron sentir, quitaron las imágenes rápidamente, aunque la reacción de Swift comenzó a viralizarse rápidamente en las redes sociales. Al mismo tiempo, según informó The Blast, la cantante disfrutó del evento desde una de las suites de lujo exclusivas del estadio, cuyo costo puede alcanzar entre 2 y 3 millones de dólares, para presenciar el partido.
Taylor llegó a la cancha acompañada por la rapera Ice Spice, con quien compartió la suite junto a un grupo selecto de familiares y amigos. Entre los asistentes se encontraban su padre, Scott Swift, su hermano Austin Swift, y las hermanas Haim: Alana, Este y Danielle, quienes son conocidas por su estrecha relación con la cantante. También estuvieron presentes los padres de Travis Kelce, Donna y Ed Kelce, así como su hermano Jason Kelce y su esposa Kylie Kelce. Este círculo íntimo se reunió para disfrutar del evento deportivo más importante del año en Estados Unidos.
Patrick Mahomes eligió el peor momento posible para tener quizás la peor mitad de un partido en su carrera profesional en el fútbol americano.
El quarterback de los Chiefs de Kansas City completó 6 de 14 pases para 33 yardas sin touchdown y dos intercepciones —una de ellas un pick-six del esquinero de los Eagles, Cooper DeJean— mientras Filadelfia tomaba una ventaja de 24-0 al medio tiempo en el Super Bowl.
Los Chiefs lograron un primero y diez durante los primeros 30 minutos, y ocurrió en su primera jugada ofensiva, un pase de 11 yardas a JuJu Smith-Schuster después de haber obligado a los Eagles a despejar. ¿El resto de la mitad? Solo ganaron 14 yardas más.
Aunque no toda la culpa fue de Mahomes, sí la mayor parte. La línea ofensiva de los Chiefs fue dominada por el frente defensivo de los Eagles, que no solo capturó al Jugador Más Valioso del Super Bowl tres veces, sino que también ejerció tanta presión sobre Mahomes que jugó un papel importante en ambas intercepciones; la segunda, por Zack Baun hacia el final de la mitad, llevó a otro touchdown.
Del otro lado, Saquon Barkley corrió 31 yardas en la primera mitad del Super Bowl y estableció el récord de la NFL para la mayor cantidad de yardas terrestres en una temporada, incluyendo la postemporada, superando la marca de 2.476 establecida por Terrell Davis.
El Jugador Ofensivo del Año de la NFL, Barkley, necesitaba solo 30 yardas para superar el total de Davis establecido en 1998 cuando ayudó a los Broncos de Denver a ganar el Super Bowl. Además, esa temporada, Davis fue el último corredor en ganar el Jugador Más Valioso del Super Bowl.
Barkley llevó el balón en la primera jugada ofensiva del Super Bowl y finalmente alcanzó la marca después de una primera mitad lenta con un acarreo de dos yardas en la última jugada de la mitad. Barkley tuvo 12 acarreos para 31 yardas, con un promedio de solo 2,6 por acarreo. Promedió 5,8 en la temporada regular.
Barkley tenía motivos para sentirse festivo el domingo, no solo por establecer el récord y jugar en su primer Super Bowl en su primera temporada con los Eagles, sino que también cumplió 28 años.
El astro argentino disfrutó del espectáculo en Nueva Orleans, donde deleitó la final de la NFL junto a varios compañeros del Inter Miami y miembros de su familia.
Messi estuvo acompañado por sus hijos (Thiago, Mateo y Ciro) y compañeros de su club: Luis Suárez, Sergio Busquets y Jordi Alba también asistieron al evento.
