Sergio Busquets sigue dándole vueltas a su futuro. El capitán azulgrana se debate con la oferta que tiene sobre la mesa y la Dirección Deportiva quiere tener una respuesta cuanto antes para poder planificar la próxima temporada. La demarcación de Busquets es clave ya que no tiene recambio natural en la plantilla por lo que si no sigue el club está obligado a buscar un refuerzo.
Hay varios factores que entran en juego para que Busquets tome su decisión. Uno de ellos es meramente económico. La oferta que le ha puesto el Barcelona supone una rebaja muy importante respecto a lo que gana en la actualidad. El club le pagaría siete millones brutos por la temporada que le propone, lo que significa una tercera parte de lo que gana en la actualidad el capitán.
Rebaja sustancial
No es fácil aceptar una rebaja de este tipo, aunque Busquets es plenamente consciente de la grave situación económica del club. Hay muchos problemas con el Fair Play Financiero y poco margen para gastar. Y luego habría que ver qué ofertas tiene fuera del Barcelona. Se habla de la MLS, pero allí tampoco podrían hacer grandes desembolsos.
Luego está el tema emocional. Xavi no deja de insistirle para que se quede un año más. Tiene absoluta confianza en el que fuera su compañero y sabe que en el mercado ahora mismo no hay grandes recambios. Y no se puede descartar que si sigue en el club azulgrana pueda jugar de nuevo con Messi, una opción que va tomando forma con el paso del tiempo. Y el reencuentro con Messi siempre seduce.
