El coordinador de la Mesa Agropecuaria Nacional, afirmó que tras nueve meses se ha logrado controlar la infestación del gusano barrenado y que El Salvador no ha sufrido pérdidas masivas.
EL SALVADOR.- El coordinador de la Mesa Agropecuaria Nacional, Mateo Rendón, afirmó que tras nueve meses de lucha contra el gusano barrenador, El Salvador ha logrado contener los niveles de infestación gracias a la articulación de esfuerzos entre ganaderos, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el Ministerio de Salud y universidades.
Rendón recordó que la crisis más fuerte ocurrió entre marzo y mayo, cuando la plaga atacó con fuerza al ganado bovino, caballos, cabras y mascotas, en un contexto donde no había disponibilidad de productos veterinarios adecuados. “Los ganaderos usaban criolina o gasolina porque no había otra cosa en los agroservicios. Eso disparó los niveles de infección”, explicó.
La respuesta oficial incluyó campañas de prevención, capacitación y el desarrollo de un producto nacional: Barremax, elaborado por el laboratorio LAVIS, que demostró alta eficacia contra la plaga. Asimismo, la aplicación de ivermectina en el hato ganadero fortaleció el control. “Hoy no hemos eliminado el gusano, pero sí lo tenemos bajo control, a diferencia de países vecinos como México, Honduras o Guatemala, donde la plaga ha generado pérdidas masivas”, destacó Rendón.
El coordinador también señaló que en el punto más crítico hubo al menos diez casos de infestación en humanos, pero que desde junio no se han reportado nuevos afectados gracias a la disponibilidad de insumos y a la concientización promovida por los medios de comunicación.
En otro tema, Rendón destacó que el invierno 2025 ha sido “bonancible”, lo que favoreció la producción de granos básicos. A pesar de la baja disponibilidad de mano de obra y los efectos del cambio climático en años anteriores, la apuesta del MAG por retomar la siembra de frijol en invierno dio resultados positivos.
Como parte de un plan piloto, se cultivaron 500 manzanas de frijol, logrando una cosecha de entre 12 y 15 mil quintales, lo que evitó un alza en los precios del grano. “Ese éxito demostró que, si se retoman estas estrategias, el país puede volver a ser autosuficiente en frijol, como lo era antes”, subrayó.
Rendón concluyó que el trabajo articulado entre instituciones, productores y medios de comunicación ha sido clave para enfrentar tanto la plaga como los retos productivos.